El 7 de junio de 1907, Auguste Lumière presentó la fotografía en color en París. Este evento marcó un hito en la historia de la imagen, ofreciendo una nueva perspectiva visual al mundo.
El proceso, conocido como "Autochrome Lumière", fue el primer método comercialmente viable para producir imágenes en color. Utilizaba placas de vidrio cubiertas con una mezcla de almidón de papa y colorantes.
La presentación tuvo lugar en la Academia de Ciencias de París, generando gran expectación y asombro entre los asistentes. Los Lumière ya eran famosos por sus innovaciones en el cine y la fotografía.
Antes de este invento, las imágenes en color eran obtenidas mediante técnicas laboriosas y poco prácticas. La Autochrome simplificó el proceso y permitió una reproducción más fiel de los colores naturales.
El impacto de esta tecnología fue inmediato, transformando tanto el arte como el periodismo. Fotógrafos y artistas encontraron en ella una nueva herramienta para capturar la realidad con mayor autenticidad.
El Autochrome fue comercializado en 1908, facilitando su acceso al público general. Aunque caro, su popularidad creció rápidamente, marcando el inicio de una era de experimentación con el color en la fotografía.
En décadas posteriores, otras tecnologías de color emergieron, pero el Autochrome fue el pionero. La innovación de los Lumière estableció los cimientos para el desarrollo de la fotografía en color moderna.
Hoy, la fotografía en color es una parte integral de nuestra cultura visual. El legado de Auguste Lumière y su Autochrome perdura, recordándonos el poder de la innovación en la transformación de las artes visuales.
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