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Padres exigen justicia y mayor seguridad tras la vandalización de la escuela
La comunidad de Maneadero se siente agredida y agraviada por la vandalización de la Secundaria Lázaro Cárdenas #8 de Maneadero.
Hace una semana, los padres de familia unieron esfuerzos para pintar toda la secundaria que da servicio a cientos de jóvenes. En la madrugada de jueves a viernes, la escuela amaneció completamente grafiteada.
Graffitear, dijeron, es un acto vandálico, porque transgrede visual, social y legalmente el orden espacial y público.
Los grafiteros se apropian del espacio de la comunidad, invaden la propiedad privada, rayan y manchan paredes limpias, pintan de manera clandestina y burlan a la ley.
Exigen padres de familia justicia, y que las autoridades escolares en Mexicali tomen cartas en el asunto. Solicitan seguridad permanente y los recursos necesarios para nuevamente pintar la escuela.
Además, exigen, no permitir que los menores estén expuestos de manera permanente al grafiti y el significado negativo que representa. Padres de familia consideran esencial la intervención de las autoridades para preservar el entorno escolar.
El llamado es a la acción inmediata para garantizar un ambiente seguro y limpio para los estudiantes. La comunidad, dijeron, no descansará hasta ver resultados y medidas concretas para evitar futuros actos vandálicos.
El grafiti es visto no solo como una falta de respeto, sino como una amenaza a la seguridad y bienestar de los estudiantes.
Las demandas incluyen patrullaje frecuente y cámaras de seguridad para disuadir a los vándalos.
La presión sobre las autoridades escolares y municipales crece, y la comunidad se mantiene unida en la exigencia de un espacio escolar digno y protegido.
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