El 2 de mayo, amaneció en llamas para Baja California, desde Mexicali, en donde manifestantes trigueros agredieron físicamente a ciudadanos que buscaban hacer trámites en el centro de gobierno, bloqueando además con tractores diversas entradas a los edificios del gobierno estatal.
Y en Ensenada, en Ensenada los encapuchados del Regidor, Mike Orea, lazarillo, marmitón de Jaime Bonilla, némesis de Marina del Pilar, trató de alborotar el gallinero en el Puerto, ahí, justo donde más le duele a la ciudadanía, en el Tramo de la Muerte, en donde sus lazarillos, a punta de piedra y mentadas de madre, agredieron a ciudadanos, unos en microbús y otros en sus autos.
El saldo, varios golpeados en Mexicali y en Ensenada, un Regidor quemado, un micro vandalizado y una sociedad harta de ser usada como carne de cañón, para las grillas morenistas del momento.
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